Un dirigente dijo: "nada de escuelas, nada de maestros, nada de libros. Si les damos eso, sabrán tanto como yo y entonces se darán cuenta de que no me necesitan".
La cultura es la mejor revolución. Seguramente por eso a los gobiernos mediocres y dictatoriales les espanta la posibilidad de un pueblo educado, culto, con preparación, con criterio. La cultura, como decía Ramón y Cajal: "refina el talento y evita las mentalidades entontecidas por le desuso"
__________________¡REACCIONA! (Javier Pérez).
Considero la cultura, la educación, como la base sobre la que se debe asentar todo ser humano. El ser humano, sin educación, es poco más que un animal desvalido cuyo destino se limita a sobrevivir, no a vivir.
En un futuro quiero ser profesora, de lengua y literatura concretamente y me espanta... me espanta el horizonte que me espera que, aunque lo veo relativamente lejos, ¿Podría cambiar? no lo creo... porque no conviene.
Si nos ponemos a analizar el sistema educativo español en seguida te das cuenta de todas sus carencias, sus errores y lo caros que éstos son para con la sociedad. Vivimos en un país poco cualificado, que deja pasar a los alumnos con tres asignaturas, que valora antes al vago que al trabajador y que premia antes la "normalidad" que la excelencia, tachando esta última de discriminatoria para con el resto.
Son solo algunos de los tantísimos errores. Se identifica "inversión en educación" con llenar las aulas de ordenadores, otro error; se conoce como "pacto educativo" una ley que a lo sumo dura cuatro años y se confunde al profesor con un educador, una niñera o algo por el estilo.
El horizonte se ve oscuro, no... opaco. Estamos criando borregos sin criterio, gente mal preparada, con carencias desde la base; gente con apenas cultura que siquiera sabe cuándo fue la Guerra Civil porque, una vez que pasa el examen, lo resetea de su memoria. Nuestra educación se basa en el aprobar, no en el aprender y ese es el mayor de los errores.
No estoy diciendo que aspire a que, en pocos años, lleguemos a tener un sistema educativo como el de Finlandia, principalmente porque algo así no funcionaría en un país como España... no por la falta de capacidad, sino por nuestra forma de ser: "cuanto menos esfuerzo y más rápido mejor".
Pero sí que digo que podemos cambiar y mucho nuestro sistema educativo, primero con un pacto político, una ley no muestra su eficacia en 4 años por muy buena o mala que sea; segundo, con inversiones de verdad, no inversiones de "qué buen partido soy y cuántos votos voy a ganar con esto" y tercero fomentando el ESFUERZO y la EXCELENCIA.
Pero claro... esto ¿Conviene?
Si la clase política se interesara por los ciudadanos como, se supone, que se tiene que interesar, fomentaría todo esto: TRABAJO, ESFUERZO y EXCELENCIA. Pero no conviene, prefieren tener en su sociedad a gente ignorante que se crea lo que dicen, que les voten; a gente poco cualificada que se conforme con lo poco que tiene (y por lo que, encima, tiene que dar gracias) y así no proteste; prefiere que, los pocos que sirven para algo, emigren para que no den problemas.
Es la realidad y es cruel y pérfida pero es así. ¿Cómo va a haber menos paro si la gente no está preparada? ¿Cómo va a haber más desarrollo si los mejores cerebros se "fugan"? ¿Cómo va a haber intelectuales, si los tachan de perros flautas, que lo único que tienen son ideas y lo único que quieren es no trabajar?
No perdona, no me considero intelectual, pero algo cercano en un futuro tal vez sí y no es que "no quiera trabajar" es que NO quiero trabajar en estas condiciones. No quiero tener una carrera y verme fregando suelos porque no encuentre trabajo en lo mío, o porque me paguen una mierda. "Emigra" dirán algunos pero... ¿Por qué me tengo yo que ir de mi jodido país para progresar profesionalmente?
Si las cosas fueran como tienen que ser, no solo nos equipararíamos a Europa en impuestos y privatizaciones sino también en calidad educativa, calidad laboral y sueldos... pero claro: no conviene.
La educación es algo completamente altruista, enseñas tus conocimientos a personas no esperando nada a cambio, lo más que esperas es que progresen en la vida, que sepan moverse, que tengan capacidad crítica, que logren encontrar la felicidad más allá de lo que se les hacen ver. Algo así es impensable en el sistema educativo español que lo único que busca es pasar de curso sin más y acabar en las filas del paro o en un trabajo mal remunerado ¿Qué expectativas son estas para nosotros, los jóvenes? DESALENTADORAS ¿Y para los futuros profesores? FRUSTRANTES, ya estoy frustrada incluso antes de empezar la carrera, qué triste.
Se debe ver la educación, la cultura como un regalo, no como un castigo (que es lo que ocurre en España). La educación en la actualidad tiende a adoctrinar a las personas, sin ir más lejos los libros de lectura que mandan leer en la ESO y la dudosa libertad de cátedra.
Yo no quiero llegar a mi futuro puesto de trabajo y que me digan tus niños tienen que leer esto, porque sí, tienen que aprender esto así porque sí y pueden pasar escribiendo haber con "v" y sin "h" porque es algo superfluo, quizás superen esa falta de ortografía en segundo de bachillerato... pues no perdona.. si existe libertad de cátedra y ésta no es tan utópica como la libertad a secas, mis niños leerán lo que yo crea conveniente para su desarrollo personal e intelectual, enseñaré como yo creo que es el mejor método para que APRENDAN no para que APRUEBEN y si tengo que suspender un curso entero porque alguien me escriba "aver" pues lo suspendo y nadie me tiene por qué llamar la atención.
En conclusión, la educación de hoy en día es un problema de todos: el gobierno, por su gestión y su manipulación; los profesores por su conformismo; los padres por su aceptación; los jovenes por su acomodamiento.
No podemos esperar cambio si no luchamos por el cambio, igual que se sale a la calle para el mundial o para pedir más democracia no entiendo por qué no se sale a la calle para pedir una educación de calidad, que es el pilar de una sociedad, su presente y su futuro.
Finalmente, cierro la entrada queridos drugos con una cita: como dijo Michel Henry, "No es de una crisis de la cultura de lo que en realidad se trata, sino más bien de su destrucción".