viernes, 18 de enero de 2013

El ser humano encaja


Las personas se adaptan. Por eso se caracteriza el ser humano, por su capacidad de adaptación. Se puede adaptar a cualquier situación, circunstancia, realidad... puede moldearse a su antojo para encajar en este o aquel puzle, ser esta pieza o esta otra, comportarse así o de otra manera. Pues no importa. Lo que importa es sobrevivir, da igual cómo.

No hay cosa que más me guste que contemplar cómo el ser humano se ha ido adaptando a lo largo de los siglos y de los siglos. Es gracioso, a la par que deprimente. Estimulante, a la par que denigrante. Interesante y también constante. Te puedes sentir identificado, o te puede producir enfado, ira, odio... incluso empatía. Me encanta contemplar lo que me rodea, acción-reacción, reciprocidad... todo tan automático que casi parece real. Una realidad orquestada por algún director loco que apunta con su batuta aquí y allá en un caos ordenado de movimientos que pocos comprenden. 

Adaptación, adaptación y más adaptación.
Y la mayoría sobrevivirá, pero ¿de qué manera?

Todas las piezas encajarán, aunque la oscuridad les rodee y les impida ver dónde meten su miembro húmedo y quejumbroso. Todo funcionará en un aparente orden contrapuesto a un aparente caos, ambos tan solo conceptos dibujados en nuestra mente, tan lejos de nosotros y aparentemente tan incomprensibles... aunque en el universo parece reinar el caos y tampoco está tan mal, al fin y al cabo allí no tienen contaminación, todo es puro

Cubículos vacíos en sus vidas y en sus mentes. Experimentan el sexo anal y se olvidan de que se pueden llenar de mierda. Pero no importa, el ser humano se adapta... para eso se inventaron los condones y los laxantes. 

 

4 comentarios:

  1. jajajaja hombre!! hizo la aparición el desaparecido!! dichosos los ojos.

    ResponderEliminar
  2. He estado viendo unos comentarios que te dejé en una de tus entradas, en el cual aparezco como anónimo. Tenemos que hacer eso, sí, pero has de esperar a que acabe con los exámenes.

    ResponderEliminar
  3. Encajaremos, siempre en futuro, como encajan las vidas en los pisos, como encaja un ataúd en su nicho.

    ResponderEliminar