Hay muchos rasgos comunes entre el Renacimiento y el Romanticismo, quizás sobre todo en la importancia que otorgaban, unos y otros, al arte y su significado para el hombre.
Los románticos pensaban que solo el arte podía llevarnos más cerca de lo inefable, algunos fueron hasta el final y compararon al artista con dios, porque el artista crea su propia realidad exactamente de la misma manera que dios ha creado el mundo. Se decía que el artista tiene una "fuerza imaginativa de creación del mundo". En su entusiasmo artístico podía llegar a sentir desaparecer la frontera entre sueño y realidad "el mundo se convierte en sueño, el sueño en mundo".
________________________________J. GAARDER ("el mundo de Sofía")