Miro el sitio donde deberías estar tú, donde todos los años te sentabas y mirabas a la abuela con ese amor que va más allá del tiempo. Donde mirabas a tu hijo y le seguías las conversaciones de antaño, donde nos mirabas a nosotros comparando con otras navidades, diciéndote seguramente a ti mismo lo que habíamos cambiado.
Otra navidad más no estás aquí... tu sitio está vacío al igual que la conversación, se nota tensa, todos sabemos por qué, estamos pensando en ti. Eras el primero al que se servía, después de todo eras el más mayor de la mesa, se nota que el brazo de mi madre vacila al cortar la primera tajada del cabrito, está pensando en ti. Se nota como la mirada de mi padre te busca en ese espacio que deberías ocupar a su lado, se nota que mi abuela rescata retazos de su memoria para tenerte presente esta noche... yo en cambio intento evitar cruzar la mirada con todos ellos para que no noten que mis ojos están húmedos, intento no pensar que deberías estar ahí pues... es de mala educación llorar en la mesa ¿No? intento que el cabrito me sepa bien y, seguro que está bueno, lo ha hecho mi madre, no puede estar de otra forma, pero sin embargo, me sabe a ceniza. Bridamos por un año mejor, por la salud, lo de siempre, yo me apresuro a beber el champán y luego me marcho a mi habitación para escribirte esto, supongo que es mi homenaje... porque no sé hacer otra cosa...
Espero que te guste mi regalo de navidad abuelo...
te echo de menos.
feliz "navidad"
Otra navidad más no estás aquí... tu sitio está vacío al igual que la conversación, se nota tensa, todos sabemos por qué, estamos pensando en ti. Eras el primero al que se servía, después de todo eras el más mayor de la mesa, se nota que el brazo de mi madre vacila al cortar la primera tajada del cabrito, está pensando en ti. Se nota como la mirada de mi padre te busca en ese espacio que deberías ocupar a su lado, se nota que mi abuela rescata retazos de su memoria para tenerte presente esta noche... yo en cambio intento evitar cruzar la mirada con todos ellos para que no noten que mis ojos están húmedos, intento no pensar que deberías estar ahí pues... es de mala educación llorar en la mesa ¿No? intento que el cabrito me sepa bien y, seguro que está bueno, lo ha hecho mi madre, no puede estar de otra forma, pero sin embargo, me sabe a ceniza. Bridamos por un año mejor, por la salud, lo de siempre, yo me apresuro a beber el champán y luego me marcho a mi habitación para escribirte esto, supongo que es mi homenaje... porque no sé hacer otra cosa...
Espero que te guste mi regalo de navidad abuelo...
te echo de menos.
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