martes, 22 de marzo de 2011

Creemos ser


¿Somos lo que somos? ¿O sólo somos lo que creemos ser? una gran duda existencial de estas que, ahora que tengo tiempo, me rondan la mente. La ociosidad es el bien más preciado del pensador, le permite divagar sin límites y eso es lo que estoy haciendo con sumo gusto después de haber liberado mi cabeza de responsabilidades estudiantiles.

La historia... la historia es una sucesión de sucesos que sucedieron sucesivamente y que nosotros interpretamos según lo que éramos o creíamos ser... el ser es la esencia de la existencia, algo lógico pues existir es ser y ser es existir pero ¿Somos realmente? yo creo que más bien creemos ser.

Vivimos sujetos a unas normas que la mayoría cree conocer pero que realmente no conoce e, incluso, no entiende. También vivimos acorde a unas tradiciones que no compartimos o tampoco comprendemos, nos son indiferentes o, en última instancia, obedecemos. Estas tradiciones y normas a su vez influyen en nosotros indirectamente aunque no las conozcamos, no las sigamos, no las entendemos o no las respetemos ¿Por qué? porque nos hemos "criao" en ellas y, de una forma u otra, forman parte de nosotros, de lo que somos. Sin embargo esto no lo contamos cuando decimos lo que somos, principalmente porque uno nunca se describe como es... sino como cree ser. No sabemos cómo somos... o rara vez somos conscientes pues son muchos los factores que nos influyen y la mayoría nos pasan desapercibidos a nosotros mismos.

Es por esto que digo que creemos ser y mucho más en el mundo de hoy en día, preñado de información que nos permite contrastar otras culturas, otras formas de vida, ideas y que nos hace que ansiemos aún más escapar de nuestra realidad y renegar de ella en algunas ocasiones, para mí un error pues así estás renegando de ti mismo. El ambiente, queramos o no nos influye, lo intentemos evitar, huyamos o nos resignemos, el ambiente, la cultura, la gente que nos rodea... nos condiciona y nos forma, nos hace ser de un modo u otro.

Por eso la tendencia más "extendida" hoy en día es... "no, yo no creo en dios" "no, yo soy contraria al capitalismo, a mi no me afecta", "soy ecologista"... y similares. Pues no... eso es lo que crees ser, yo también me considero contraria al capitalismo, no creo en dios y bueno lo de ecologista... lo dejamos ahí, pero sé que realmente no lo soy ¿Por qué?

Porque por mucho que me harte de decir que reniego de la religión que me han impuesto de pequeña, los valores religiosos están en mi, me han educado en ellos y, muchas veces inconscientemente, sé que rigen mis actos; tengo empatía hacia los que creen, si realmente no creyera no la tendría y así con mil cosas más.

En lo del capitalismo, más de lo mismo. Sí no me gusta consumir por consumir pero sé que en algunas cosas lo hago, sé que la publicidad me influye, sé que me importa el dinero, sé que acabaré entrando en esa sociedad por mucho que ahora me niegue a ello... lo sé.

¿Por qué? porque me guste o no todo ello forma parte de mi, sino lo hubiera conocido no sería así pero eso es cosa distinta, pues habría conocido entonces otras cosas y ahora esas me influirían. Cada persona es distinta, a cada persona le afecta de manera desigual lo que le rodea, unas se impregnan de arriba a abajo como se impregna la abeja que va a por polen; otras sin embargo guardan las distancias; otras huyen e intentan alejarse y creen conseguirlo y otras, como yo huyen, corren... pero saben que están atadas a esa realidad, estoy atada a mí misma, ¡No puedo huir de mi misma!

Tenemos que aceptar lo que somos. No somos altruistas por mucho que lo digamos ni somos solidarios ni ecologistas ni justos ni libres; tampoco "pasamos de todo" aunque tampoco nos implicamos, no somos autosuficientes ni tenemos un código moral personal... solo creemos tenerlo. Algunos se lo creen más otros se lo creen menos; unos logran en verdad mantenerse al margen de algunas influencias otros no y los que lo hacen desde luego no es para siempre... llega un momento en el que te cansas de luchar, a mí ese momento me ha llegado, no quiero luchar más contra mí misma, soy lo que soy, otra cosa es... lo que crea ser o lo que me gustaría ser.

De momento seguiré creyendo, es menos frustrante, al menos mientras aún me quede juventud, ideales que defender y causas perdidas por las que luchar. Luego será otra cosa, los desengaños de la vida, la inutilidad de los ideales que son solo eso, ideas... me conducirán inexorablemente a mí misma, al centro de mi ser en un viaje arduo, largo, fatigoso y horrible... sí supongo que entonces no me quedarán más cojones que entrar en el dichoso embudo y ser lo que soy ¿O lo que se espera de mi? ¿Lo que yo espero de mí? eso queridos drugos... es otro cantar que aún no estoy preparada para afrontar.

8 comentarios:

  1. uolee! me gusta lo que has puesto Ö

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  2. gracias x seguirme!! he visto ya varios comentarios tuyos ^^

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  3. GENIAL yo creo q somos mitad i mitad; somos lo que creemos ser y somos lo que somos o merecemos ser. cuidate ♥!

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  4. Hey girl muchisimas gracias por pasarte :)
    me gusto el estilo de tu blog; te sigo!
    Buena entrada !

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  5. Nosotros no podemos decir quienes somos , necesitamos preguntar a otros quienes somos ...¿Cómo sabe una persona que es mala sin que otros la rodeen? También influye el tipo de personas .. no es lo mismo el como te defina el majo del grupo que el chulo del grupo ...Pero lo que quiero decir es que es imposible saber quienes somos si no tenemos a nadie que nos lo diga.Para decir yo tienes que decir tu.Luego si nosotros mismos creemos que somos de una determinada manera ... eso es otra historia.El único hombre viviente en la Tierra jamás podríamos decir de él si sería bueno o malo ... sería prácticamente imposible

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  6. No puedes preguntar a otro cómo eres pues las otras personas tienen su propia idea de "como eres tú", ya que su idea no es de cómo eres realmente sino la imagen que tienen de ti.

    Una persona jamás podrá conocer a la perfección los entresijos mentales de otra, por mucho que se conozcan, se quieran y todo ese rollo...
    En mi opinión el papel que juegan las otras personas, como dices, es el de servirnos de contraste para nosotros mismos. Si solo hubiera un hombre viviente en la Tierra, el bien y el mal sería lo que él creyese que estaba bien y estaba mal... que podría estar o no equivocado desde el punto de vista de otra persona pero como esa otra persona no existiría el criterio no se contrasta, luego es su verdad: para él eso estaría bien o mal y sería su verdad absoluta.

    En el momento en que hubiera otra persona esos pensamientos se contrastarían, se condicionarían, se influirían.. pero no en el sentido malo (que también) sino en el sentido de compartir formas de ser con sus respectivos criterios entonces ya quizás lo que antes era absolutamente malo o absolutamente bueno ahora haya cambiado o no necesariamente, a condición de la otra persona ;)

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